"Noctámbulos".- Edward Hopper
Érase una vez...alguien que pensaba que ser era igual a tener. "Tanto tienes-tanto vales", era su lema. Como además ese alguien era muy envidioso, pensaba que tener, no era tener y cuidar lo propio, sino desear compulsiva y repetidamente lo ajeno. Por eso otorgaba más valor a lo que tenía cualquiera, aunque fuera menos valioso, que lo suyo. Despreció tanto y tanto sus pertenencias, que acabó perdiendolas todas. Unas, por falta de cuidados, otras por jugarlas como moneda de cambio para intentar conseguir lo que tenían otros. Cuando se quedó sin nada, esa persona aprendió en sus propias carnes el precio del desprecio, pues vacía su cartera, se alejaron todos aquellos que se habían acercado al olor de su dinero. ¿Qué quién es esa persona? No lo sé, queridos lectores. Es una leyenda que me trajeron los ecos del viento, o quizá me lo he inventado. O lo soñé. Y si aún no ha tenido lugar esta historia, pasará en un futuro, en este mundo o en cualquier otro. O tal vez dentro de cada uno de nosotros; hay una parte capaz de cambiar diamantes en bruto por guijarros pulidos por el río, pensando que son piedras preciosas. ¡No lo sé! Sólo soy una humilde escribidora. Y si lo escribo, es sobre todo para que nunca, nunca, nunca me ocurra a mi. Benditas sean todas y cada una de mis pequeñas cosas.
RANITA
EL BLOG DE MARPIN Y LA RANA
1 comentario:
Creo que este alguien es, por desgracia, la gran mayoría de la humanidad, Ranita.
Un abrazo
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