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sábado, 26 de abril de 2014

La importancia de llamarse Ernesto. El abanico de lady Windermere. Una mujer sin importancia. Un marido ideal. Salomé. ÓSCAR WILDE.

En una mujer sin importancia nos encontramos ante el tipo femenino en que el amor, sublimizado, se apercibe del engaño torturante y sin escrúpulos. Es entonces cuando tiene lugar esa trasmutación del ser dulce y confiado, en una persona a la cual la amargura se le renueva cada día en cuanto a la intimidad de su existencia; pero al mismo tiempo le otorga una amplitud de miras y de juicio, disponiéndola hacia la tolerancia para otros. Aquí ella sólo se mantiene inflexible para con el hombre que la humilló y la hirió en lo más hondo; en su maternidad. Cree su deber el evitar que ese individuo pueda seguir haciendo daño con su egoísmo desvergonzado que nunca toma en cuenta a los demás, si no es para provecho propio e inmediato.

                                   Marpin y la Rana.

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