y es que al cielo subía por sumas de escaleras,
trepando por la hierba de luz del arco-iris
o por los hilos de sol de mis cometas.
La, la, lará...
Ahora quiero volar y sé que antes del silencio
antes del bien y del mal, del cruel y del tirano
pasaba sobre el mundo sobre ángeles y cosas
un hombre libre con alas en las manos.
La, la, lará..
Ahora vuelvo a volar. Tengo unas alas blancas
con que abrazar el aire, rasgar el horizonte,
llegar hasta ciudades lejanas como sueños
y enseñarles a todos que es posible la vida,
es posible la vida, es posible la vida,
es posible la vida...
Suben a mi ventana gritos alucinados,
chirridos de sirena arañándome
y voces de "estás loco, volar es para pájaros".
Pero extiendo mis alas, miro hacia el cielo y salto,
miro hacia el cielo y salto, miro hacia el cielo y salto,
miro hacia el cielo y salto...
Miro hacia el suelo y caigo.
-Hilario Camacho-
Marpín y La Rana
2 comentarios:
Caer tras tocar el cielo con las manos, tal vez no sea tan mala idea ;)
Kagones S.A te saludan.
Ave. Cesar.
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