No hay poemas
Sin
esas hebras de hilos
Revueltos
o mojados
Y
sin las posibilidades
En
que se convierten los segundos
No
hay poemas
Sin
ese calor redondo que forma una guarida
No
hay versos
Si no
hay batallas
Si
no distingo tu divisa en mis dominios
Sintiendo
guerras sin armas
Y
victorias sin prisioneros
No,
no hay versos
Sin
el rescoldo de los fuegos de hielo
esa ceniza de ti mismo
Que
dejas caer sobre mi llanto
Como
si fuera hojarasca.
Y
nunca mas habra poemas
Si pierdo de vista
esa ternura sin equipaje
que nunca sé si llega o se va.
Ranita
MARPIN y LA RANA
1 comentario:
En aquella arpa dorada estaba cautiva la arpista.
Se la veía del otro lado de las cuerdas y no podía salir de allí.
Era como un pájaro en una jaula dorada.
Me gustó tú poema.
A
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