EL BLOG COMPARTIDO

jueves, 23 de junio de 2011

SONETO XLVIII




Dos amantes dichosos hacen un solo pan,
una sola gota de luna en la hierba,
dejan andando dos sombras que se reúnen,
dejan un solo sol vacío en una cama.
De todas las verdades escogieron el día:
no se ataron con hilos sino con un aroma,
y no despedazaron la paz ni las palabras.
La dicha es una torre transparente.
El aire, el vino van con los dos amantes,
la noche les regala sus pétalos dichosos,
tienen derecho a todos los claveles.
Dos amantes dichosos no tienen fin ni muerte,
nacen y mueren muchas veces mientras viven,
tienen la eternidad de la naturaleza.

PABLO NERUDA

El Blog de Marpín y La Rana, 
con el espíritu de los Indignados. 
Luchando, a pesar de la tristeza.
Nadie nos podrá quitar jamás la poesía
y seguiremos alimentando a la famélica Esperanza.


6 comentarios:

Irene dijo...

Precioso.Grande Pablo Neruda.Gracias por traerlo a tu espacio.
Un abrazo.

Sergio dijo...

Me uno con vosotros al mismo espíritu de los indignados. Y al placer de ese poema que proponéis. Delicioso.

MUCHITA dijo...

Pablo Neruda, mmmmm. Es como comer un caramelo delicioso, de tu sabor favorito.

Besos mil.

Mascab dijo...

Neruda y los indignados juntos, enlazados por el soneto que has elegido para ello y justo en los días en que se habla del Neruda indignado por el asalto al Palacio de la Moneda en Santiago de Chile...
Indignados por los políticos de ahora como nuestros padres lo hiceron ante los políticos de entonces.

Besos

Ana Bohemia dijo...

Sólo Pablo Neruda podía decir cosas como esas: "La dicha es una torre transparente" A veces no hay que escalar mucho por esa torre para alcanzar la dicha, basta leer algo bonito, escuchar buena música o sentirse inspirado, eso es dicha.
Pobre esperanza, espero que jamás muera de hambre, hay que seguir luchando.
Saludos Marpin y la rana.
:)

Anónimo dijo...

No conocia este verso y es precioso.
Lurdes Ballo