Con nuestra Carmela: El niño se ha hecho un anciano, una sombra callándose. Le esperan un poco más allá.
La boca entreabierta, la cabeza y los ojos hundidos, el fruto de la carne, agua a la nueva vida. Ven conmigo, hombre. ¡Aquí vengo yo a custudiarte. Las alabanzas y las bendiciones son tuyas. Ven con fe al leal funámbulo, camina delante por los hilos y no pierdas el equilibrio; que gran descanso eterno tendrás, y noble será el reposo.
(Lestrigones)
El blog de marpin y la rana
7 comentarios:
Descanso y reposo.
Un poco triste
Pilar
Seguimos esperando un destino trazado de antemano...¿¿¿Es esta toda nuestra infinita verdad??
Fatal, esto de no perder el equilibrio, jeje...habra q prestar mas atencion en el caminar, besitos chicos
Hello!
Muy bonito, pero a los lestrigones, por muy grandes que sean no hay que tenerles miedo.
Eso decimos Kavafis y yo.
Besos.
¿est une premonnicione?
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