"Mi espino".- Cecilia Alvarez
TIEMPO
Ni la piedad estéril ni la hosca penitencia:
saber que somos eso.
Así el espino albar acepta su caída
y se sabe aún espino bajo el viento que sopla desnudo en la noche,
tan suave, negro y rígido que ni oímos su aliento entre las cañas.
-Pere Gimferrer-
El blog de marpin y la rana les acompaña en la noche.
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