A primera vista parecen juguetes de peluche, hechos con felpa. Pocos saben su secreto. Todas las noches, a las doce y un minuto, los tres recobran a la vez sus vidas anteriores, y se convierten en demonios y posteriormente en ángeles celestiales. Ni es un sueño ni me lo imagino. El acontecimiento sucede cuando estoy despierto, y yo les hablo de los mortales y de la naturaleza, les doy pan y agua, les hago compañia y hasta les consuelo un poco, y a cambio ellos me dan a mi mucho más.
Marpin_
2 comentarios:
TOTAL QUE SACAS EL NIÑO INTERIOR,
TE VUELVES PEQUEÑITO E INOCENTE.
UN ABRAZO, Montserrat
Viva la imaginación, Montserrat.
Un abrazo muy fuerte.
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