Quizá todo no esté perdido...
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Este polluelo nació en Africa sin garras y no podía andar. Alguien con ingenio y buena voluntad le diseñó esa especie de calcetines, para compensar la ausencia. El ave hace una vida completamente normal.
Hoppa nació sin patas delanteras. Los veterinarios aconsejaron su sacrificio. Alguien le adoptó y diseñó para él esta prótesis. Ahora convive con sus dueños y otros perros y es el más travieso de todos.
Ante ejemplos tan escándalosos de tortura animal, estás imagenes nos hacen pensar en la Esperanza de un mundo un poquito mejor.
Buen día a todos.
Marpin y La Rana
5 comentarios:
Quizás nuestra capacidad de preocuparnos por un animalillo indefenso pueda ser alegado a nuestro favor.
ME ENCANTA QUE HAYA PERSONAS QUE AMEN A ESTAS CRIATURAS DE DIOS.
GRACIAS `POR COMPARTIR ESTAS IMÁGENES.
Un abrazo, Montserrat
Por suerte siempre hay buenas personas en este mundo
Aunque lo único que se observe a nuestro alrededor es el daño que hacemos, de vez en cuando encontramos cosas como éstas que nos hace recordad que aún existe bondad y humildad entre nosotros.
El que maltrata a un animal indefenso puede hacer cualquier cosa.
Me alegro de ver estos ejemplos de solidaridad.
Saludos
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