¡Increíble pero cierto! La crecida del río EBRO rompe su cauce en Zaragoza y se lleva por delante a la alcaldesa de Cartagena. ¡La verdad, amigos míos! Al fin y al cabo se impone, Y aún escrita en las arenas, Perdura más que los bronces.
Con sus palabras infunde
Entusiasmo tan enorme
Que todos bullen, movidos
Por eléctrico resorte.
-M. G. Prada-
Marpin y la Rana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario