Las avenidas llenas de basura, el desfile militar y todos sus participantes, incluidos los reyes y la Virgen. Los abucheos e insultos al Presidente del gobierno de España, ofenden a los que somos demócratas. No se respetó el momento del homenaje a los caídos. La libertad de expresión no está reñida con el respeto, aunque sólo sea hacia los muertos.
Pedro Catela
1 comentario:
Se nos olvida que tu libertad acaba donde empieza la mía.
Una pena
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