"Unión de los Contrarios"
Rey y reina, la virilidad y lo femenino, hombre-mujer, ying y yang. El Sol y la Luna, y el día y la noche, nuevamente lo masculino y fenenino, lo claro y lo oscuro, lo visto y lo oculto. El dragón encarna el principio de unificación, y la estrella representa la Piedra Filosofal. Todos unidos.
Platón y los pitagóricos- dicen- que todas las cosas aspiran a la imitación a través de un largo intervalo; no obstante, establecen como una antítesis entre la díada indefinida y el Uno, en la cual- está- lo infinito y lo desordenado y, por decirlo así, todo lo informe en sí mismo. En suma, no -sería- posible, sin ella la naturaleza del todo, sino que -entre los principios- es posible que su parte sea igual o que exceda a la del otro, y por ella los principios con contrarios. Por ello, ni siquiera Dios- puede dirigir todas las cosas hacia lo mejor, sino, en todo caso, dentro de lo que quepa. Pero quizá ni siquiera se lo propondría, si realmente hubiera de sobrevenir la aniquilación de la entidad entera, pues ésta está- constituida- a partir de los contrarios y reside en los contrarios.
Faustino.
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